A Costa da Morte: Una aventura de 200 kilómetros.









A Costa da Morte fue "bautizada" con este término por el diario Noroeste de Galicia allá por el año 1904 y la hizo "bilingüe", Cost of Death, la escritora de viajes Annette Meaking en 1908, haciendo referencia a los dramáticos sucesos documentados y contabilizados en pérdidas humanas y desastres ecológicos, durante el período que va desde el siglo XVI hasta nuestros días. Avalan estos datos más de 900 naufragios.  

Este tramo de litoral, abarca desde el municipio de Muros hasta el de Arteixo, siendo la "zona cero" la parte que comprende Fisterra, Muxía y Camariñas. En este recorrido, de más 200 kilómetros, nos encontramos lugares icónicos como son: el Monte Pindo u Olimpo Celta con sus más de 600 metros de altitud a pura roca, "toxo" y "xesta"; el Cabo de Fisterra, que desde la antigüedad se conoce como el fin de la tierra (Finis Terrae); con aires ancestrales, el Santuario da Virxe da Barca celebra una de las romerías más importantes de Galicia; Cabo Vilán anuncia e "ilumina" la parte del océano más peligrosa del mundo, que es, en realidad, una sepultura abierta y tristemente representada en el Cementerio de los Ingleses. Aquí, ya en el corazón de la zona cero y a pocos metros, nos encontramos la Ensenada de Trece un lugar  abrupto y lleno de belleza paisajística, principalmente por su duna remontante y su costa empedrada que llega hasta Arou. Siguiendo hacia Camelle, Man o Alemán, en su bendita locura, perfiló con su arte las piedras que delimitan su puerto. Llegando ya al municipio de Malpica, nos encontramos "encallado" en plena roca el faro de Punta Nariga con su proa enfilando al mar. Las vistas a las Islas Sisargas desde el Cabo de San Adrián, son un gran colofón a este repaso de los lugares más icónicos de este territorio.  

A Costa da Morte abarca los ayuntamientos de Cabana de Bergantiños, Camariñas, Carballo, Carnota, Cee, Coristanco, Corcubión, Dumbría, Fisterra, A Laracha, Laxe, Malpica de Bergantiños, Mazaricos, Muxía, Ponteceso, Vimianzo y Zas. Este territorio no se visita en una semana ni en 10 días; aquí se conjugan a la perfección el patrimonio natural con el cultural y ambos se pueden recorrer en múltiples rutas de senderismo: como la de O Camiño dos Faros, un recorrido que, al haberse hecho internacional, se intuye que ya "camina" sólo (espero que no demasiado y a las administraciones me remito).  Otras opciones son la Senda Verde de Carnota, la Ruta da Auga de Zas,  Os Segredos do Val de Vimianzo, Verdes y Os Penedos de Pasarela e Traba entre muchas otras. A mayores, los grandes arenales (Carnota, Area Maior, Rostro, Traba, Razo), estuarios (Anllóns), Marismas (Baldaio) completan una gran oferta natural. Desde el punto de vista cultural, las visitas a las villas de Muros, Corcubión o Laxe son de obligado cumplimiento. A esta propuesta también se le pueden sumar los diferentes conjuntos etnográficos de ascendencia romana, como es el Puente de Brandomil y una fortaleza  amurallada que se encuentra en las proximidades. Diversos castros (como el emblemático de Borneiro) y un sinfín de estructuras megalíticas (Dombate, Arca da Piosa, etc.) redondean esta oferta cultural.  

Un punto y aparte a esta propuesta cultural y natural es el Roteiro Literario de Labarta Pose, que abarca varios municipios (250 km), con 21 puntos de interés y que se entenderá mejor entrando a los enlaces que aporto al final del post. 

En resumen, a pie, en bici o en coche, este geodestino es atemporal en tanto en cuanto se puede visitar en cualquier estación del año, pues su belleza no se marchita en otoño o en invierno, al contrario, la fuerza del océano Atlántico en estas estaciones, es quien ha bautizado de verdad a la Costa da Morte.


Enlaces relacionados:

Roteiro Literario Labarta Possse,

http://roteiros.culturagalega.gal/roteiros/ficha/42

Camiño dos Faros itinerarios,

https://www.caminodosfaros.com/









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